La salud en mi país, ¿Importa?

Actualmente Venezuela está atravesando una situación de decadencia que no había leído en los libros de historia o escuchado hablar antes como anécdotas de alguien que haya vivido épocas difíciles en el país. Es cierto que cada nación tiene sus momentos buenos y malos, pero este momento que estamos viviendo quienes nos encontramos en estas ciudades nos hace preguntarnos día a día ¿podrá esto ser peor? ¿cómo será todo mañana? ¿cómo podemos salir de esta situación?.

Diferentes ámbitos y áreas han sido descuidadas y el área de la salud no queda inmune a este declive. Es así como lo refleja el boletín epidemiológico del Ministerio del Poder Popular para la Salud de 2016 publicado recientemente, el 10 de mayo del presente año 2017, luego de casi 2 años de ausencia de datos epidemiológicos, para conocer un registro de los casos de enfermedades de notificación obligatoria en el país.

Los resultados son sorprendentes, ya que comparados con el año 2015, existe un aumento de la mortalidad infantil en un 30% y de la mortalidad materna en un 65,79%.

Algunos datos importantes que se deben resaltar de este boletín epidemiológico son:

  • 11.466 niños menores de 1 año murieron en 2016 en comparación con 8.812 niños en 2015, lo que implica un aumento de 30,12%.
  • 756 muertes maternas ocurrieron en 2016, comparadas con 300 en 2015, lo que implica un aumento de 65,79%.
  • 324 casos notificados de difteria en el año 2016, cuando la enfermedad había sido "erradicada" en Venezuela hace 24 años.
  • 240.613 casos notificados de malaria en 2016, comparados con 136.402 casos en 2015, lo que evidencia un aumento de 76,4%. En 2013 se notificaron 75.000 casos. Una enfermedad que también había sido erradicada entre los años 60 y 70.
De esta manera, a través de estos datos, queda plasmado el descenso de la calidad tanto de la vida de los pacientes como de los centros sanitarios y hospitalarios públicos especialmente, pero también privados del país. 

Cada día, actualmente en los hospitales de Venezuela, es difícil tratar a los pacientes por la simple razón de que no se cuenta con los insumos necesarios para su correcto cuidado y manejo. Esto ha traído consigo un acumulo de pacientes y una lista cada vez mayor de utensilios que, el paciente mismo o sus familiares, debe traer al centro asistencial para ser tratado.

Los niveles de pobreza, falta de los medicamentos en farmacias y aumento de precios de los mismos (debido a su importación de otros países por la escasez) también contribuyen a que esta situación sea cada vez más decadente.

Parece algo insólito, pero es la realidad del país latinoamericano. Un pionero y emprendedor de la salud en el continente que ahora se encuentra agonizando, clamando por ayuda, preguntando si de verdad importa la salud de todos los que lo habitan para poder recuperarse él mismo.

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